El zinc es un nutriente esencial que desempeña un papel importante en la función cerebral y puede ser útil en la gestión de los síntomas del TDAH, especialmente la hiperactividad y la impulsividad.
Los estudios respaldan la suplementación de zinc como una opción complementaria a los tratamientos convencionales para el TDAH, aunque se requiere más investigación para entender completamente su impacto en la atención y otras funciones cognitivas.
En este artículo hablamos de los beneficios del zinc para gestionar los síntomas del TDAH, su relación con el cerebro y cómo puede complementar los tratamientos convencionales.
El zinc y el cerebro
El zinc es fundamental para la función cerebral debido a su influencia en neurotransmisores clave, como el glutamato y el ácido gamma-aminobutírico (GABA), que regulan la excitación y la inhibición neuronal, respectivamente. También tiene un papel en la modulación de la dopamina, un neurotransmisor esencial para las funciones cognitivas, emocionales y motoras. Se cree que el desequilibrio en los niveles de dopamina es una de las principales causas del TDAH.
El zinc es necesario para la actividad de la superóxido dismutasa (SOD), una enzima antioxidante que protege el cerebro de los radicales libres y del estrés oxidativo, los cuales se asocian con el deterioro cognitivo y los problemas de atención. A través de su impacto en la neurotransmisión y la protección contra el daño oxidativo, el zinc contribuye a mantener la estabilidad neuronal y el correcto funcionamiento cerebral.
Deficiencia de zinc y su relación con el TDAH
Diversos estudios han encontrado que los niños con TDAH suelen tener niveles más bajos de zinc en comparación con sus pares sin el trastorno. Un meta-análisis publicado en Progress in Neuro-Psychopharmacology & Biological Psychiatry reveló que los niveles de zinc en sangre son significativamente más bajos en niños con TDAH. Esto sugiere que la deficiencia de zinc podría estar vinculada a la aparición o la exacerbación de los síntomas de TDAH, como la falta de atención, la hiperactividad y la impulsividad.
La relación entre el zinc y el TDAH también ha sido explorada en ensayos clínicos. En un estudio realizado por el Journal of Child and Adolescent Psychopharmacology, los niños que recibieron suplementos de zinc mostraron una mejora en los síntomas de hiperactividad e impulsividad, aunque los efectos sobre la atención fueron menos pronunciados. Esto apoya la idea de que el zinc puede ser más efectivo para manejar los síntomas conductuales que los cognitivos del TDAH.
Beneficios del zinc en la gestión del TDAH
Mejora la regulación de la dopamina
El zinc desempeña un papel en la síntesis y regulación de la dopamina, el neurotransmisor que influye en la motivación, la atención y la conducta. Los niveles bajos de dopamina están asociados con síntomas de falta de atención e hiperactividad. El zinc ayuda a mejorar la función de los receptores dopaminérgicos y puede mejorar el equilibrio de dopamina en el cerebro, lo que podría reducir la impulsividad y la hiperactividad.
Un estudio publicado en el Journal of Attention Disorders mostró que los niños con TDAH tratados con suplementos de zinc junto con su tratamiento convencional (como metilfenidato) mostraron una mejora más significativa en el control de los síntomas que aquellos que no recibieron zinc. Esto sugiere que el zinc puede ser un complemento útil para los medicamentos tradicionales.
Reducción del estrés oxidativo
El estrés oxidativo se refiere al daño celular causado por los radicales libres, que pueden afectar la función cerebral. El zinc actúa como antioxidante al formar parte de la enzima superóxido dismutasa, que neutraliza los radicales libres y protege al cerebro de posibles daños. Las personas con TDAH tienden a tener un mayor nivel de estrés oxidativo, lo que podría empeorar los síntomas de inatención y comportamiento impulsivo.
Un estudio en el Journal of Human Nutrition and Dietetics encontró que los niños con TDAH tenían niveles más bajos de zinc y una mayor susceptibilidad al estrés oxidativo. El uso de suplementos de zinc mejoró el equilibrio oxidativo en estos niños, lo que podría tener un impacto positivo en la regulación del comportamiento y la atención.
Apoyo a la función cognitiva
El zinc es esencial para la función cognitiva y el desarrollo neurológico. Juega un papel crucial en la señalización sináptica, la neurogénesis y la plasticidad cerebral, todos ellos procesos que son fundamentales para el aprendizaje y la memoria. Dado que el TDAH puede afectar la capacidad de concentración y el rendimiento académico, mejorar la función cognitiva a través del zinc podría ser beneficioso.
Un estudio realizado por la European Journal of Clinical Nutrition mostró que los niños con deficiencia de zinc que tomaron suplementos presentaron mejoras en la función cognitiva y en las habilidades de aprendizaje. Estos hallazgos respaldan la idea de que el zinc puede tener un impacto positivo en la capacidad de atención y el rendimiento escolar de los niños con TDAH.
Efectos sinérgicos con otros nutrientes
El zinc interactúa con otros nutrientes importantes para el cerebro, como el magnesio y los ácidos grasos omega-3. Por ejemplo, se ha demostrado que el zinc potencia los efectos de los ácidos grasos omega-3 en la regulación del comportamiento y la función cognitiva. Un estudio publicado en Nutrients encontró que la combinación de zinc y omega-3 mejoraba significativamente los síntomas del TDAH en comparación con la suplementación de omega-3 o zinc por separado. Esta combinación podría ser útil para padres que buscan alternativas naturales o complementos a los tratamientos farmacológicos.
Alimentos que tienen zinc
Como siempre que hablamos de suplementos para el TDAH, os recordamos que también es posible obtener zinc de manera natural a través de la dieta.
Algunos alimentos ricos en zinc incluyen las carnes rojas, especialmente la carne de res y de cordero, así como las aves de corral, como el pollo y el pavo. Los mariscos, particularmente las ostras, son una de las fuentes más concentradas de zinc. También se encuentra en productos de origen vegetal, aunque en menor cantidad, como las semillas de calabaza, las nueces, los garbanzos, las lentejas y otros tipos de legumbres.
Los cereales integrales y los productos lácteos también son buenas fuentes. Incorporar una variedad de estos alimentos en la dieta puede ayudar a asegurar una ingesta adecuada de zinc y contribuir a la gestión de los síntomas del TDAH de forma natural, sin recurrir exclusivamente a suplementos.
Posibles efectos secundarios del zinc
Aunque los estudios sugieren que el zinc puede ser beneficioso para el manejo de los síntomas del TDAH, es importante destacar que la suplementación de zinc debe hacerse bajo supervisión médica. Demasiado zinc puede causar efectos adversos, como náuseas, dolor abdominal y desequilibrios en otros minerales importantes, como el cobre. Los suplementos de zinc deben tomarse según las recomendaciones diarias adecuadas, que generalmente son de 8-11 mg para niños y adolescentes, dependiendo de su edad y sexo.
Es importante realizar análisis de sangre para determinar si el niño tiene una deficiencia de zinc antes de iniciar la suplementación, ya que no todos los niños con TDAH tendrán bajos niveles de zinc. Además, el zinc debe considerarse como parte de un enfoque integral que incluya otros nutrientes, intervenciones conductuales y, si es necesario, medicamentos bajo la dirección de un profesional de la salud.
Fuentes:
- Arnold, L. E., et al. (2011). «Zinc for Attention-Deficit/Hyperactivity Disorder: Placebo-Controlled Double-Blind Pilot Trial Alone and Combined with Amphetamine.» Journal of Child and Adolescent Psychopharmacology.
- Mahmoudi, M., et al. (2015). «Comparison of Serum Zinc Level in Children with Attention Deficit Hyperactivity Disorder and Control Group.» Journal of Attention Disorders.
- Oner, O., & Oner, P. (2008). «Zinc Deficiency in Attention-Deficit/Hyperactivity Disorder.» Progress in Neuro-Psychopharmacology & Biological Psychiatry.
- Millichap, J. G., & Yee, M. M. (2012). «The Diet Factor in Attention-Deficit/Hyperactivity Disorder.» Pediatrics.
- Mousain-Bosc, M., et al. (2006). «Improvement of Neurobehavioral Disorders in Children Supplemented with Magnesium-Vitamin B6.» Journal of the American College of Nutrition.
- «Zinc and its role in neurodevelopmental disorders: Review of literature and study on young patients with ADHD.» Nutrients, 2020.
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