El mundo digital está lleno de ventajas: conexión global, acceso a información en segundos y entretenimiento al alcance de un clic. Pero ¿qué pasa cuando esas bondades tienen un lado oscuro, especialmente para las personas con TDAH?
En este artículo hablamos de cómo las redes sociales y la tecnología están afectando a quienes viven con esta condición. SPOILER: las redes sociales NO son la causa del TDAH, pero tampoco lo ponen nada fácil.
Por qué las redes sociales son tan adictivas para un TDAH
Las redes sociales son un imán para el cerebro, y esto se intensifica en las personas con TDAH. ¿Por qué? Porque este trastorno está ligado a una búsqueda constante de recompensas inmediatas, y cada like, notificación o nuevo vídeo en TikTok activa la dopamina, el químico que regula el placer. Esto explica por qué muchos se sienten enganchados al scroll infinito. Según un estudio de Andreassen et al. (2016), las personas con TDAH tienen más probabilidades de desarrollar adicción a las redes sociales que aquellas sin esta condición.
Son las redes sociales la causa del TDAH
No.
Las redes sociales no son la causa del TDAH, ya que este tiene un origen multifactorial que incluye factores genéticos y neurobiológicos. Sin embargo, si es verdasd que, como hemos explicado, su dinámica, basada en estímulos rápidos, constantes y altamente recompensantes, puede agravar los síntomas característicos del TDAH, como la impulsividad, la dificultad para mantener la atención y la hiperactividad.
El uso excesivo de redes sociales puede reforzar patrones de distracción y reducir la capacidad de atención sostenida en otras áreas de la vida. La necesidad de validación externa a través de interacciones en línea puede aumentar la dependencia emocional y, en algunos casos, empeorar la autoestima de las personas con TDAH.
El problema de las pantallas y la atención
Aunque las pantallas no «causen» TDAH, sí pueden exacerbar los síntomas. Investigaciones del Child Mind Institute señalan que juegos de ritmo rápido y plataformas de contenido breve pueden agravar los problemas de atención en niños y adolescentes. En adultos, estas dinámicas fomentan la impulsividad y dificultan enfocarse en tareas importantes.
Para muchos, las redes son una distracción constante: intentas trabajar, pero un mensaje en WhatsApp o una notificación en Instagram te arrastra. Las personas con TDAH no solo luchan con estas distracciones, sino que pueden pasar horas en estos entornos sin darse cuenta del tiempo que ha pasado. Esto sucede porque sus cerebros priorizan la recompensa instantánea sobre las metas a largo plazo.
Redes sociales y autoestima
Las redes sociales no solo afectan la atención, también la autoestima. El sistema de recompensas basado en likes puede generar una dependencia peligrosa de la validación externa. Para alguien con TDAH, esto puede intensificar la inseguridad y el estrés. En lugar de sentirse bien consigo mismo por logros reales, la percepción de valía puede depender de la cantidad de interacciones en línea.
Videojuegos: ¿aliados o enemigos?
Los videojuegos son un tema controvertido en el ámbito del TDAH. Por un lado, ofrecen un espacio para la creatividad y el enfoque intenso; por otro, pueden convertirse en una fuente de problemas. Un estudio de Bioulac et al. (2018) encontró que las personas con TDAH tienen un mayor riesgo de desarrollar adicción a los videojuegos. Esto se debe a que los juegos ofrecen recompensas rápidas y constantes, lo que encaja perfectamente con la búsqueda de estimulación en los cerebros con TDAH.
¿Es todo malo?
A pesar de los riesgos, la tecnología también tiene beneficios. Aplicaciones diseñadas para organizar tareas o establecer recordatorios pueden ser herramientas útiles para quienes tienen TDAH. Además, las redes sociales pueden proporcionar un espacio para conectarse con comunidades que comprenden sus desafíos.
El problema no está en la tecnología en sí, sino en cómo se usa. Un consumo consciente puede marcar la diferencia, especialmente si se establecen límites y se adoptan estrategias para evitar caer en patrones de uso compulsivo.
Algunos estudios que hablan del tema
- Andreassen, C. S., et al. (2016). Relación entre TDAH y adicción a redes sociales
- Bioulac, S., et al. (2018). Riesgo de adicción a videojuegos en personas con TDAH
- Child Mind Institute. Informe sobre videojuegos y TDAH